Entrevista de Alejandro Jodorowsky a Alberto García-Alix.
Es un trago mostrarlas [las fotografías] y exponerte al juicio de los demás, a sus preguntas -inteligentes o estúpidas-, a sus halagos. El halago es lo que más me fastidia. Si me insultan sé qué decir. Pero el halago de intimida, me hace dudar. Así pues, cuarto de juguetes y al mismo tiempo cámara de tortura. Al final la fotografía es un látigo. Muestra sin contemplaciones tus vicios y tus virtudes.
Moriremos mirando, Alberto García-Alix.
Cuando leí esto, recordé la entrevista que le hizo Jodorowsky en la que lo entierra en halagos. Al verla, me dio la impresión de que Jodorowsky le hacía ver cosas en sus fotos en las que él nunca había caído. Es lo bonito del arte, el autor lo hace y el espectador lo completa. A ver qué os parece.
La obra de arte me parece a mí que no está completa totalmente hasta que el espectador no la ve, la observa y dialoga con ella. En ese momento, el arte cobra sentido pleno.Saludos!!